miércoles, 27 de abril de 2011

France Télécom : un salarié se suicide en s'immolant par le feu/ Un empleado se suicida por inmolación

Un salarié de France Télécom-Orange âgé de 57 ans s'est suicidé, mardi 26 avril au matin, en s'immolant par le feu sur le parking d'un des sites de l'entreprise situé à Mérignac, près de Bordeaux.
"Les secours arrivés sur place n'ont pu que constater le décès de ce salarié", a précisé la direction du groupe, ajoutant avoir mis en place une cellule psychologique. Arrivée sur place en fin d'après-midi, la directrice exécutive d'Orange France, Delphine Ernotte, a assuré qu'"une enquête sera[it] diligentée" sur le suicide du salarié, "en toute transparence avec les partenaires sociaux".

L'homme qui s'est suicidé était père de quatre enfants. Il était représentant du personnel pour la CFDT et préventeur, c'est-à-dire chargé des conditions de travail, de l'hygiène et de la sécurité, depuis plusieurs années.

UN CHANGEMENT DE POSTE "MAL VÉCU"

"L'ensemble du personnel est complètement submergé d'émotion, a indiqué Sébastien Crozier, responsable syndical (CFE-CGC - UNSA) à France Telecom. C'est l'horreur absolue." Selon lui, le salarié "avait été très affectée par la période de redéploiement, de suppression d'emploi" mise en place par l'ancien directeur du groupe Didier Lombard.

Cette politique de modernisation à marche forcée s'est notamment traduite par la suppression de seize mille emplois entre 2006 et 2008 et des mobilités contraintes. "Fonctionnaire à France Télécom depuis trente ans, il a changé souvent de poste, a indiqué François Deschamps, responsable CFE-CGC - UNSA de la région Sud-Ouest. Cette mobilité imposée lui avait fait vendre sa maison, il avait écrit à plusieurs reprises à sa direction et il n'avait pas eu de réponse à ma connaissance." François Deschamps, qui avait vu le salarié deux ou trois semaines plus tôt, ne l'avait pourtant pas "senti au pied du suicide". Il décrit une personnalité sociable. "C'était quelqu'un de très reconnu professionnellement, de très crédible."

"TOUT N'EST PAS RÉGLÉ À FRANCE TÉLÉCOM"

D'autres syndicats ont fait part de leur tristesse après ce suicide. "C'est un drame", a déclaré Pierre Dubois de la CFDT. La CGT a indiqué, de son côté, que ce suicide était "la démonstration que tout n'est pas réglé à France Télécom".

Ce suicide ravive en effet une plaie chez les salariés du groupe : le suicide de treize salariés en 2008 puis de dix-neuf en 2009, avait déclenché une importante crise sociale au sein de l'entreprise en 2009. Le système de management avait notamment été mis en cause, et Didier Lombard, PDG depuis 2005, montré du doigt. Il avait eu la maladresse d'évoquer une "mode du suicide", au plus fort de la controverse. Depuis, ce dernier a cédé les rênes opérationnelles du groupe, le 1er mars 2010, à l'actuel directeur général, Stéphane Richard, avant d'annoncer son départ définitif de l'entreprise en février 2011.

"Peut-on toujours détecter quelqu'un en période de fébrilité dans une entreprise de cent mille salariés. Peut-on être infaillible ? La preuve que non", a reconnu mardi la directrice exécutive, tout en affirmant que "toute la lumière, pour autant qu'on puisse la faire, sera[it] faite. (...) "Si ce drame devait renforcer quelque chose, c'est notre détermination qu'il faut poursuivre dans la voie engagée avec Stéphane Richard et continuer cette reconstruction."

Selon un décompte de l'Observatoire du stress et des mobilités forcées, créé à l'initiative de deux syndicats du groupe (SUD et la CFE-CGC - UNSA), on a encore déploré un suicide en 2011, survenu en janvier au domicile d'un salarié, et vingt-sept suicides et seize tentatives en 2010. Des chiffres que ne confirme pas la direction, qui dit ne pas vouloir établir de "comptabilité macabre".

 Article repris de http://www.lemonde.fr/societe/article/2011/04/26/france-telecom-un-salarie-s-est-suicide-en-s-immolant-par-le-feu_1512911_3224.html

miércoles, 20 de abril de 2011

De cómo trabajar las historias orales desde el ilusionismo social. Javier Encina, UNILCO-espacio nómada. Sevilla.

 http://ilusionismosocial.org/

Tebas, la de las Siete Puertas, ¿quién la construyó?
En los libros figuran los nombres de los reyes.
¿Arrastraron los reyes los grandes bloques de piedra?
Y Babilonia destruida tantas veces,
¿quién la volvió a construir otras tantas?
¿En que casas de la dorada Lima vivieron los obreros que la construyeron?
La noche en que fue terminada la Muralla china,
¿adónde fueron los albañiles?
Roma la Grande está llena de arcos de triunfo. ¿Quién los erigió?
¿Sobre quiénes triunfaron los Cesares? (...)
Una victoria en cada página.
¿Quién cocinaba los banquetes de la victoria?
Un gran hombre cada diez años,
¿quién pagaba sus gastos?
Una pregunta para cada historia.
Bertolt Brecht.

¿Para qué sirven las historias orales?
Cuando nos preguntamos ¿para qué sirven las historias orales?, no cabe otra respuesta que la de Gustavo en “La estrategia del caracol”: ¡pa’ la dignidá’ ¡pa’ la dignidá’ nuestra!; tras esto se retiran los medios de comunicación de masas... Tal vez sea el momento de poder empezar a trabajar desde nuestras propias inquietudes.
A la hora de trabajar cualquier proceso de participación debemos tener en cuenta tres aspectos fundamentales:
Nuestra acción no debe centrarse en la toma del poder (ya sea de forma en que una vanguardia promueve la insurrección, o en que una vanguardia organiza un partido y gana las elecciones), ni en el empoderamiento (que al fin y al cabo es una toma de poder, habitualmente en el marco de las lógicas dominantes); sino en la autogestión colectiva del poder con el horizonte utópico de su disolución, en el desempoderamiento. La autogestión nos cambia la mirada desde la toma del poder al poder hacer/pensar/sentir, lo que implica saberes, habilidades y quereres. Además, siempre hace referencia a una dimensión colectiva que parte del flujo social, del hacer/pensar/sentir de otr@s y con otr@s. Para ir construyendo la autogestión colectiva del poder es necesaria en primer lugar la resistencia, tanto en el nivel de oposición/conciencia, como en el de interacción creativa. En segundo lugar es necesaria la ruptura que abra hacia la innovación, que de lugar a nuevas propuestas que provoquen renunciar a la identidad y potenciar las identificaciones. Y en tercer lugar, cauces de participación que den forma a la oposición/interacción/innovación que tendrán que construirse en el proceso, fruto de las diversas acciones que se vayan realizando.

Desde las historias orales se pueden trabajar, sin posibilidad de separarlos:
 el intercambio de saberes, haciendo ver la importancia de lo que sabe la gente; construido y aprendido fuera de las instituciones del estado y del mercado (aunque en una continua oposición, consentimiento y entrelazar la cultura oficial, la cultura de masas y las culturas populares).
 los cauces de participación, partiendo de la autogestión y la descentración que potencian las formas de transmisión de dichas historias.
 las motivaciones que, al sentir la realidad como una construcción colectiva, te ponen en disposición de comprender que el futuro depende en buena manera de lo que puedas vivir con los demás.

¿Dónde podemos encuadrar las historias orales?
Para muchas personas que pululan alrededor de la universidad o de los ayuntamientos pueden ser un nuevo nicho de empleo, y por lo tanto, las encuadran en las estrategias que marcan estas instituciones: la acumulación de organizaciones y de legitimidades, ya sean políticas o científicas.
Para otras personas es una nueva fuente de denuncia para crear una nueva conciencia de clase o una nueva conciencia nacional; y, por lo tanto, están en la lógica de acumulación de fuerza para llevar a cabo las estrategias de vanguardia. Tal como las trabajamos, las historias orales son parte de la dialéctica de construcción/deconstrucción de la democracia cotidiana. Por lo tanto, las encuadramos dentro de un proceso en el que la gente puede ir construyendo la autogestión de su vida cotidiana.
Proceso en el que las historias orales son vehículo de transmisión y forma de construcción de cosmovisiones, formas de hacer/sentir/pensar y de relaciones, que pueden ser impuestas, consentidas o construidas colectivamente y que se caracterizan por su potencialidad para ayudar a la transformación desde la vida cotidiana.
Por esto, (trabajar las historias orales para la transformación desde la vida cotidiana), hay que trabajar la historia de la gente en los espacios y tiempos cotidianos, nunca la historia de los territorios. Nuestra historia es la interacción de nuestras vidas; independientemente donde hayamos nacido, nuestras vidas aportan cualidad y calidad a los espacios y tiempos que vivimos.

¿Qué son las historias orales?
Una de las herramientas-técnicas que usamos en los procesos de ilusionismo social; son aquellas herramientas que además de responder al ¿cómo vamos a hacerlo?, pueden abrir hacia otras posibilidades. Se caracterizan por su posible transversalidad, con ellas se puede hacer un recorrido a lo largo de todo el proceso.
Las historias orales no son las historias de las personas que no saben escribir, son las historias de las que, por su posición asimétrica con respecto al poder, sólo pueden transmitir sus historias verbalmente; son las historias de las personas desposeídas por no tener dinero, por no ejercer el poder político, por no pertenecer al género, la edad o la cultura dominante...
Las historias orales son las historias de la mayoría social a la que aún no han podido robarle el conocimiento, los recursos y las formas de transmisión de las narraciones orales. Al tener un soporte tecnológico descentrado facilitan la resistencia, el ser autogestionadas, y el poder ser apropiadas fácilmente por la gente. En palabras de Emmanuel LIZCANO (1984:10) “que la escritura tenga un bien ganado prestigio por el impulso que haya podido dar a la ciencia, que quien esto escribe saque de ella no sólo sustento sino hasta placer físico, no autoriza a nadie a desertizar el suelo de las culturas orales. No tendrán escritura, pero tienen otros logros de los que nosotros carecemos, y –que yo sepa- nunca han emprendido campañas de oralización que llevaran a la hoguera nuestros libros como formas de superstición e incultura. Gentes de letras y gobierno: las culturas del verbo no habitan tan solo en continentes lejanos. Gitanos y euskaros, gallegos y andaluces, nuestros propios
críos y hasta los abismos inconscientes que anidan en cada uno de nosotros, tan letrados, tienen su palabra. Como sabía Juan de Mairena, aún ‘es muy posible que, entre nosotros, el saber universitario no pueda competir con el folklore, con el saber popular’. ¡Dejadles, dejadnos, dejémonos en paz”.
O como nos plantea Hans Magnus ENZENSVERGER (1986:7) “nunca se trató de allanar el camino a la cultura escrita y mucho menos aún de liberar a los hombres de su minoría de edad. El progreso del que se hablaba era un asunto muy diferente. Consistía en amaestrar a los analfabetos a la más baja entre las clases de hombre, en arrebatarles su fantasía y su obstinación para, en adelante, no explotar solamente la fuerza de sus músculos y la habilidad de sus manos, sino también su cerebro”. Pensar que la historia escrita es la Historia objetiva, y las historias orales son percepciones subjetivas de cada entrevistado, es no conocer el papel que ha tenido la Ciencia dominante en los últimos dos siglos. Es desconocer su estrategia de crear una única Historia Global, cuya explicación sería la racionalidad humana, dejando de lado las discontinuidades, los espacios de no progreso, y la posibilidad de repensar el pasado (puesto que objetivamente es algo acabado).
La lógica dominante es descubrir, o sea buscar y explicar desde el presente dominante los acontecimientos del pasado, encajándolos en la racionalidad dominante del presente, para dar sentido de progreso y globalidad.
Las alógicas de las historias orales es encontrar en el pasado formas de vida que nos ayuden a comprendernos en nuestro presente, posibilitándonos la reproducción ampliada de la vida cotidiana desde la que podamos construir nuevas cosmovisiones que nos ayuden a transformar el futuro. “Al menos en esto no desbarró Pablo de Tarso: la letra mata, el espíritu da vida. Letra que es ley, abstracción, burocracia y planificación: sumisión de la posible vida indefinida a una norma fija, intemporal, que diría García Calvo. Espíritu que es, para todas las culturas del verbo, soplo, oralidad, expulsión de aire en un pronunciar que crea. En su modo oral, la lengua es órgano y palabra, liga ‘lo fisiológico y lo psicológico (y lo lógico), da primacía al ritmo y a la pausa, subordina lo oratorio a lo respiratorio, la representación a la acción, la idea a la emoción’, en expresión de Duméry. En ella, hasta el silencio es elocuente” (Emmanuel LIZCANO, 1984:10).
Las historias orales son tan antiguas como la capacidad de comunicarse de la especie humana...
Siempre se hace referencia a que los primeros historiadores (Herodoto, Tucídides, Polibio, etc.) no sólo buscaban evidencias documentales, sino que las contrastaban y completaban con los testimonios orales. Pero desde la historiografía contemporánea se fueron encasillando las historias orales a contextos donde las culturas orales eran el eje de la producción y transmisión de conocimientos.
Sobre todo a partir del siglo XIX las fuentes escritas pasaron a ser el material exclusivo de los historiadores, potenciando la historia política y de los grandes acontecimientos: la Historia únicade los grandes hombres (la Historia de la Humanidad). Las historias orales quedaron en manos de los antropólogos indigenistas y de los aficionados locales. La Historia busca su carácter científico en el uso y análisis exclusivo de fuentes documentales. La irrupción de la perspectiva cualitativa en la Historia hace volver la mirada hacia lo social. Así, a partir de los años cuarenta (con la generalización de la grabadora) comienzan a constituirse en las universidades de los EEUU, grupos de investigación sobre historia oral: de un carácter archivístico y empírico, su preocupación principal era registrar voces y construir archivos.
En Gran Bretaña surge, en los sesenta, una historia oral que tiene por objeto la historia social de los trabajadores, de las minorías étnicas, de las mujeres,.... De aquellos grupos usualmente olvidados por el registro de la Historia1. En los países mediterráneos y escandinavos este carácter social se complementa con lo local y con lo popular.
En España, esta corriente no tiene su boom hasta la muerte del dictador Franco (1975). Durante lo que se ha dado en llamar la Transición se vuelve la mirada hacia el movimiento obrero, la Segunda República y la resistencia antifranquista, lo que obliga a la utilización de fuentes orales, pero el nuevo orden democrático se encarga de que pierda sentido el historiador comprometido, al igual que el cantautor, el pintor del pueblo, el cura obrero... Y así, hacia finales de los ochenta estas figuras han quedado como una moda pasajera, volviéndose a construir la Historia desde el postulado cientifista de los documentos son nuestra única fuente de conocimiento. Olvidándose de la propuesta de Daniel BERTAUX (1977:29) “la recopilación de narraciones de vida no es una técnica. Es mucho más. Es un nuevo enfoque sociológico y este enfoque crea gradualmente la necesidad de revaluar todos los otros aspectos de la praxis y el método sociológico actuales”.
Las historias orales liberan las voces de los sujetos, poniendo en cuestión el pretexto de la objetividad y la tendencia de “cosificar lo que está vivo y estructurar lo que es conflicto y contradicción” (Daniel BERTAUX 1979:25); obligándonos a pensar en abandonar las metodologías e ir construyendo formas de hacer que liberan el pensar/sentir/hacer de los sujetos individuales y/o colectivos; unas formas de hacer fronterizas, contaminadas y mestizas que esté en continua adaptación a los procesos sociales. Como plantea F. ELEGÖET (1978:9) “que su lógica interna surja a través de las prácticas y las representaciones de sus actores”, potenciando así nuevas mediaciones sociales que sirvan para el enriquecimiento de los propios procesos sociales. Como plantea Martine BURGOS (1993:163) “creo que las historias de vida son el mejor material –y tal vez el único- sobre el cual se puede basar la investigación de la manera en que el individuo
construye su autoimagen social como producto viviente de la interacción de diversas clases de tensión”.

¿Cómo hemos hecho las historias orales?
Haciendo un esfuerzo de sistematización, aunque no nos guste, podríamos identificar cinco
momentos:
Momento 1, entrevistas.
Momento 2, elaboración del borrador de las historias orales (de las historias de la gente no de los territorios).
Momento 3, lectura del borrador a los entrevistados y debate en talleres.
Momento 4, elaboración definitiva.
Momento 5, difusión.
0. Es conveniente saber algo de historia del pueblo, mediante algún informante o en su defecto
alguna historia escrita.
1. A la hora de seleccionar a las personas a entrevistar hay que tener en cuenta varias cosas:
-Matriz social:
1. Debe de entrevistarse a personas de los diversos segmentos de clases sociales, de las
diversas culturas del trabajo, de las diversas culturas relacionales (etnia, edad...) y de los
diversos géneros.
2. Diversidad espacial: que estén representadas las distintas divisiones del pueblo (pueden
ser barrios, puede ser arriba y abajo, de un lado o de otro de un río o de una carretera,
etc.)
3. Identidad de adscripción: pertenecer a una hermandad, a un equipo, a veces a
tendencias políticas y religiosas.
-El tipo de entrevista debe ser abierta, con una primera pregunta general que abra el discurso del entrevistado, y con los sentidos de sensibilidad, creatividad y oportunidad ir completando la historia mediante preguntas “no directas” del tipo ¿en este pueblo no se jugaba?.
-Hay que tener en cuenta que el momento de la entrevista mezcla tres situaciones: 1) el recuerdo de lo vivido; 2) la situación actual del entrevistado; 3) la propia situación de la entrevista. Es muy importante comprender bien estas tres situaciones para sacarle el mayor partido a la entrevista.
2. Cuando tenemos todas las entrevistas hacemos un borrador; en las historias orales de Pedrera (1997), de Las Cabezas de San Juan (2001) y de Olivares (2009), nos ha servido hacer cuatro grandes bloques:
-Uno que giraría en torno a las historias que nos han contado nuest@s mayores (que sólo se
desarrolló en Pedrera).
-Los otros tres bloques girarían en torno a lo que hemos vivido y los estructuramos en torno a la casa, la calle, y las formas de poder institucional; aunque, claro está, caben otras muchas formas de estructuración teniendo en cuenta la diversidad de temas que podemos trabajar usando como excusa las historias orales.
3. Reunimos a las personas entrevistadas en talleres de debate, normalmente dividiéndolas en torno a los temas que más han hecho referencia.
En el taller se va leyendo el borrador y debatiendo cada epígrafe, así se va completando.
4. Una vez acabados los cuatro o cinco talleres (o los que hagan falta) se elabora la versión definitiva.
5. Se hacen encuentros entre l@s narrador@s y otra gente del pueblo, (así sólo se hizo en Las Cabezas de San Juan; en los otros lugares fueron l@s coordinador@s los que asumieron este papel), bien en espacios de sociabilidad, o centros educativos... para divulgar las historias y provocar nuevas acciones.

Una manera de aprender, de forma simulada, a hacer una historia oral.
Se divide al grupo con el que queramos trabajar en subgrupos de tres personas (A, B y C) desarrollando los siguientes momentos:
MOMENTOS 1 2 3
Cuenta la historia A B C
Entrevistador B C A
Escribe la historia C A B
La historia narrada puede ser cualquiera que se comparta por parte de todas las personas que realizan el taller, o como último recurso el cómo se han interesado por realizar el propio taller y su desarrollo.
Momento 4, después de estos “tres momentos”, las personas A, B y C elaboran el borrador de la
historia oral, con las tres historias...
En el momento cinco leen el borrador, lo debaten y elaboran la historia oral definitiva del subgrupo.
El momento seis es el tiempo para que cada subgrupo exponga su historia; y se cierra con el momento siete, donde se elabora una historia oral de todos los subgrupos.

Bibliografía
Jorge ACEVES (Comp) (1993) Historia Oral. Ed. Universidad Autónoma Metropolitana. México.
Marc AUGÉ (1998) Los no lugares. Ed. Gedisa. Barcelona.
Daniel BERTAUX (1977) Comment l’approche biographique peut transformer la practique sociologique. Recherches Économiques et Sociales nº 6.
(1979) Ecrire la sociologie. Information en Sciencies Sociales nº 18.
Martine BURGOS (1993) Historias de vida. Narrativa y la búsqueda del yo.
Gerardo CAMACHO DE LA ROSA (2007) Raíz y razón de Totolapan: El drama de la guerra zapatista. Ed. Centro de Estudios Antropológicos. México.
Harvey COX, (1983) La fiesta de los locos. Ed. Taurus. Madrid.
Beatriz DÍAZ (2009) Hambre gracias a Dios, nunca pasamos. Ed. Atrapasueños. Tarifa (Cadiz).
Fanch ELEGOËT (1978) la société paysanne bretonne par l’approche biographique. Ponencia presentada al 9º Congreso Mundial de Sociología.
Javier ENCINA, Víctor FERNÁNDEZ SALINAS Y Montserrat ROSA (2004) Espacio público y medioambiente urbano. Cuchará’ y paso atrá’ nº 8. Sevilla.
Javier ENCINA, y Juan Carlos MEJÍAS, (1997) Nacionalismo y Culturas Populares: una lucha por el tiempo y el espacio. Colectivo de Estudios Marxistas (Coord.) en Nacionalismo Internacionalismo una visión dialéctica. Sevilla.
Javier ENCINA y Montserrat ROSA (1998) Juan Camacho Castilla. Recuperación histórica de la memoria de nuestro siglo XX. Ed. Muñoz Jiménez. Sevilla.
(1999) La ideología del poder y el poder de las ideologías populares. Cuchará’ y Paso atrá’, nº7, febrero-abril.
(2000) El gran teatro del mundo, o de cómo los ayuntamientos intentan repartir papeles, organizar espacios y marcar tiempos, en T.R. VILLASANTE, M. MONTAÑÉS y J. MARTÍ. (Coord) en La investigación social participativa. Ed. Viejo Topo. Barcelona. (2002) El Reparto: investigación-acción participativa (iap) y presupuestos participativos en Las Cabezas de San Juan (Sevilla), en Concha LORENZANA (ed), Tomamos la palabra. Ed. Icaria. Barcelona.
(2004) Oralidad y participación. De cómo trabajar las historias orales desde la
investigación participativa. Introducción a las historias orales de Pedrera, en Javier
ENCINA y otr@s. Participación, comunicación y desarrollo comunitario. Ed. Atrapasueños.Sevilla.
Javier ENCINA y otr@s (2002) Introducción a las historias orales de Las Cabezas de San Juan. Ed.
Ayuntamiento de Las Cabezas de San Juan (Sevilla).
(2009) Oportuna Memoria. Ed. Diputación de Sevilla.
Javier ENCINA y Juan Manuel ZARAGOZA (2008) A vueltas con el ilusionismo social. Cuchará’ y
paso atrá’ nº 18. Sevilla.
H. M. ENZENSBERGER (1986) Elogio del analfabeto. EL PAÍS; sábado 8 de febrero.
P.P.A. FUNARI (1991) La cultura popular en la antigüedad clásica. Ecija (Sevilla), Gráficas Sol.
Nestor GARCIA CANCLINI. (1982) Las culturas populares en el capitalismo, La Habana (Cuba),
Casa de las Américas.
Enrique GIL CALVO (1991) Estado de fiesta. Ed. Espasa Calpe. Madrid.
Maurice GODELIER (1989) Lo ideal y lo material. Ed. Taurus. Madrid.
C. GRIGNON y J.C. PASSERON (1992) Lo culto y lo popular. Ed. La piqueta. Madrid.
Agnes HELLER (1998) Sociología d e la vida cotidiana. Ed. Península. Barcelona.
Dolores JULIANO (1992) Cultura popular. Ed. Anthropos. Barcelona.
Emmanuel LIZCANO (1984) Cuando no saber escribir es no saber escribir. Liberación; jueves, 8
de noviembre.
Beatriz LUQUE y Javier ENCINA (2007) De las mediaciones consentidas a las mediaciones
deseadas. Lo masivo y lo colectivo en los procesos de comunicación. Cuchará’ y paso atrá’ nº 15.
Sevilla.
Jesús MARTÍN-BARBERO (1987) De los medios a las mediaciones. Ed. Gustabo Gili. Barcelona.
(2007) Desafíos de lo popular a la razón dualista. Cuchará’ y paso atrá’ nº 17. Sevilla.
Jean MEYER (1984) La tradición oral y su valor para la historia de países como México, en
VV.AA. Historia y diversidad de las culturas. Ed. Serbal. Barcelona.
Grupo de Investigación PARTE HARTUZ (2008) Deusto y Rekalde. Historia e identidad contada
por sus protagonistas. Ed. Ayuntamiento de Bilbao.
Rápale SAMUEL (ed) (1984) Historia popular y teoría socialista. Ed. Crítica. Barcelona.
Mª Teresa SIRVENT (1999) Cultura popular y participación social. Miño y Dávila Editores. Buenos
Aires/ Madrid.


viernes, 1 de abril de 2011

La historia del DIARIO de la Región, cooperativa de trabajo.

“Vaciamiento”, “Fábrica cerrada”, “trabajadores en la calle”; eran términos y títulos bastante comunes en los cabezales de las páginas del diario, cuando despuntaba el siglo XXI en Argentina.
Eran expresiones y contenidos que se venían masticando y escribiendo en la redacción , que constituían los efectos groseros de la política económica nacional subyugada por los vidrios de colores del neoliberalismo.
Signos habían como para estar alertas: meses de sueldo sin cobrar, discretas invitaciones del director para con algunos empleados a renunciar a la empresa, movimientos extraños como el retiro de cierta tecnología de punta… Abundaban las especulaciones a voz baja en los pasillos que, aunque nunca es bueno sumarse a los corrillos, estaban palpando una verdad que nadie se atrevía a reconocer.

El grito de alerta se escuchaba a los cuatro vientos. Mas, como ilustra Jean Paul Sartre, uno no se imagina que vienen por uno, hasta que le toca a uno.
Y así fue que un día cualquiera del 2002, en una jornada semejante a la de cientos o miles de jornadas en la historia de un diario, fulminó la primicia: “Opama (se terminó en guaraní) el diario” dio la voz un compañero. Sumó otro en un intento de traducir: “Se borró Balbuena” (el empresario dueño); alguien fue concreto: “Viene la justicia a cerrar el diario”.
Era la tarde noche. Y en ese lapso, entraban los oficiales de justicia a la redacción trayendo la mala nueva, apoyados por Gendarmería que hacía cordón al edificio.
Bien valía para la ocasión el consabido “paren las rotativas”, porque tomaba forma una fatídica noticia que esta vez, no llegaba del afuera, sino de los propios intestinos.
Ese patrón inmoral -del que todo había que temer-, acababa de hacer una jugada maestra: salió de su despacho portando el maletín de cuero, diciendo “hasta mañana” a quienes se cruzaba, y desapareció, para siempre.
Venía la justicia a cerrar el diario. Los compañeros casi intuitivamente, defendieron la salida del diario de ese 22 de octubre, sintieron que era menester sacarlo a la calle incluso antes de tomar conciencia completa de lo que estaba pasando.
Más o menos así sucedió aquel día cuando casi un centenar de trabajadores quedaba en la calle…
Solo una veintena decidió dar lucha.

LA PRE HISTORIA

Gráfica Chaqueña SACI fue fundada en1990 y el dieciséis de noviembre de ese año, en José Hernández 286 de Resistencia, editó el primer número de El Diario Chaqueño e Independiente.
Hacía su aparición en la provincia del Chaco un medio de comunicación gráfico, que despuntaba como saludable opción a la verdad monopólica del único medio de prensa existente.
Con el desguace de un diario recientemente cerrado en Santa Fe y la inversión de empresarios locales, abrió sus puertas el flamante medio periodístico. Fundado “a la alta escuela”, con un staff periodístico relevante, una visión noticiosa fresca y renovada y estrategias de mercado exitosas, se posicionó rápidamente.
A fines de 1993 un porcentaje importante de las acciones fueron vendidas a un empresario correntino, quien fundó Editora del Nordeste S.A. Entre ambas empresas se dividían las funciones; una, encargada de la cuestión editorial: producción y redacción de las noticias; y la otra, de las correspondientes a taller, impresión y distribución.
Cinco años después, Apint fue creada por las dos firmas como Sociedad Anónima dedicada a la prestación de servicios. Ésta, resultó ser una “empresa fantasma” por la cual se “fugaban” los ingresos del diario mientras en el interior de la empresa comenzaban a aparecer los primeros problemas financieros relevantes.
Sobrevivientes de la vieja guardia rememoran: “El 2001 fue el año de mayor tiraje, cuando más se vendía el diario, cuando más publicidad entraba, y sin embargo, nosotros no cobrábamos un centavo por presunta falta de fondos”.
La informalidad en el pago de haberes no sólo la padecieron los trabajadores sino también los proveedores de ambas firmas, con los cuales las deudas crecieron a ritmo galopante.
Dentro de la cartera de proveedores se encontraba Complaspel SACeI. Esta empresa era uno de los proveedores que más sufría las consecuencias de las prácticas ilícitas, ya que el diario le adeudaba importantes sumas. Fue la primera en reclamar judicialmente sus acreencias.
El ocho de agosto del año 2001 Complaspel SACeI, con domicilio en Capital Federal, patrocinada por sus abogados, solicitó a la Jueza que decrete la quiebra de Gráfica Chaqueña SACI y Editora del Nordeste S.A.
En el petitorio se sostuvo claramente que la deudora ya había incumplido distintos acuerdos celebrados entre ambas partes, por lo cual no encontraban otro medio para cobrar sus acreencias.
Los antecedentes legales expuestos ante el juzgado eran de noviembre de 1998, cuando judicialmente presentaron cargos persiguiendo el cobro de capital más intereses adeudados desde julio de ese año.
En abril de 1999 se llegó a un acuerdo donde los demandados reconocieron adeudar más de cincuenta mil pesos, los que serían abonados en nueve cuotas mensuales y consecutivas de cinco mil setecientos pesos, el mismo fue homologado judicialmente.
Los pagos se cumplieron sólo parcialmente por lo que los intentos de ejecución judicial prosiguieron.
En mayo de 2000 se arribó a un nuevo acuerdo, por el cual se debían abonar diez cuotas de cinco mil ciento cincuenta pesos cada una, de éstas sólo pagaron tres cuotas con demoras y la cuarta con cheques rechazados, los cuales fueron sustituidos posteriormente por efectivo.
Con todo ello, en octubre del año 2000 la deuda de El Diario Chaqueño e Independiente con Complaspel SACeI , ascendía a treinta mil novecientos pesos sin considerar intereses por mora. No había más mediación
Cumplido todos los pasos procesales y ante los reiterados incumplimientos por parte de Gráfica Chaqueña SACI, el Juzgado Civil y Comercial de la Décima Nominación a cargo de la doctora Norma Alicia Fernández de Schuk, dispuso el martes 1º de octubre de 2002 la quiebra de Gráfica Chaqueña SACI y se procedió a nombrar los síndicos de ambas empresas, los cuales fueron la contadora. Graciela Pérez como síndico en los autos caratulados “Gráfica Chaqueña SACI s/ Quiebra pedida por Acreedor- Hoy Quiebra” y al contador Víctor Tacca como síndico en los autos caratulados “Editoras del Nordeste s/ Quiebra pedida por Acreedor- Hoy Quiebra.”
Habían pasado una docena de años de la pre-historia del diario.


HORA DE DECISIONES

Casi un centenar de familias chaqueñas dependía de ese medio de comunicación que quebró durante la gestión del último patrón.
Patrón que elucubró su plan armado de tres empresas creadas a la medida de sus necesidades: Editora del Nordeste S.A., Gráfica Chaqueña SACI y APINT S.A., que sintetizaban en “El Diario Chaqueño e Independiente”. Pero valga aclarar que la caída del diario, no fue exclusivamente por el marco político- económico de los tiempos desbarrancados del “que se vayan todos”, sino, principalmente, por la complicidad y la impunidad lograda durante la gestión del gobierno de entonces.
Del vamos, la jugosa pauta publicitaria que recibía el empresario no condecía con el padecimiento de sus trabajadores.
El personal era sometido a evidentes arbitrariedades: bajos salarios, demora en el pago de sueldos, limitaciones y dificultades para cumplir con la tarea diaria, violaciones convencionales, deudas por los aportes de ley, entre numerosas otras obligaciones impagas, que fueron dibujando la nefasta gestión; paradojal, ya que la cartera de clientes comerciales del diario desbordaba y la presencia que marcaba en el mercado, se traducía en la gran tirada de ejemplares
Durante el año 2001 los trabajadores no cobraban sus sueldos con regularidad y desde fines de ese año los pagos de haberes fueron suspendidos como así también el de aguinaldos. Ajustaba la soga al cuello en extremo. Pero el temor de perder la fuente laboral, hacía agachar la cabeza, resguardando la ilusión de que simplemente se atravesaba una coyuntura por superar.
Tiempo después, los trabajadores comprobaban que sus empleadores ni siquiera cumplían con el deber de realizar aportes en su nombre. Esta situación que obligó a la acción, llevó a que se planteen quejas por distintas vías, sea directamente, tal las denuncias ante los organismos de control avalados en mayor medida por el sindicato de Prensa y en menor medida por el Sindicato de Gráficos.
Pero volvamos a esos días que marcaron la muerte y la resurrección.
Los oficiales de justicia se presentaron en el diario, el primero de octubre de ese mismo año, con el objetivo de desalojar y cerrar el edificio. En este intento de cierre también participó personal de Gendarmería.
 Mientras se rodeaba el perímetro edilicio, los empleados estaban trabajando en el cierre de la edición del día, y en cuanto tomaron conocimiento de los hechos se amotinaron, literalmente, e impidieron el desalojo, sosteniendo que no iban a abandonar el lugar de trabajo; asimismo, solicitaron de inmediato a los síndicos autorización para poder terminar la edición del día siguiente.
Las sindicaturas accedieron al pedido y permitieron que se edite el diario del dos de octubre de 2002.
(Establece el artículo 189 de la Ley de Concursos y Quiebras –LCQ- que corresponde a la Sindicatura tomar la decisión de continuar o no con la actividad de la empresa quebrada, expresando: “Continuación inmediata. El síndico puede continuar de inmediato con la explotación de la empresa o alguno de sus establecimientos sólo excepcionalmente, si de la interrupción pudiera resultar con evidencia un daño grave al interés de los acreedores y a la conservación del patrimonio. Debe ponerlo en conocimiento del juez dentro de las veinticuatro horas…”).
Ambas sindicaturas resolvieron la continuación inmediata de la actividad en resguardo del patrimonio de la empresa fallida.
Y salió el diario ese día, y saldría el siguiente, y el siguiente…









UNA MÁS, RECUPERADA

El contexto de crisis que vivían los ex empleados los llevó a pensar en las posibilidades legales de continuar y para ello buscaron asesoramiento letrado. Habiendo conocido cuales eran las alternativas optaron por seguir el ejemplo de las muchas empresas del país que lograron recuperarse. En esta etapa fue determinante el aporte, desde el punto de vista legal, de la abogada Laura Tisembaum y también de la guía y contención del Sindicato de Prensa.

¿Por qué se adoptó la forma de cooperativa? “Era la única posibilidad que nos cabía, pero además de salvar la fuente de trabajo, aparecía un sistema de bondades extraordinarias”, recuerda un asociado.
El dieciocho de octubre de 2002, los trabajadores de Gráfica Chaqueña SACI, así como los de Editora del Nordeste presentaron a sus respectivos síndicos de quiebra, una nota donde hicieron saber que habían tomado la decisión de poner toda su voluntad y esfuerzo para la continuidad de la fuente laboral.
Este pedido se enmarca en la novedad introducida por el artículo 190 de la LCQ en su segundo párrafo: “En toda quiebra, aun las comprendidas en el artículo precedente, el síndico debe informar al juez dentro de los veinte días corridos contados a partir de la aceptación del cargo, sobre la posibilidad excepcional de continuar con la explotación de la empresa del fallido o de alguno de sus establecimientos y la conveniencia de enajenarlos en marcha.
En la continuidad de la empresa se tomará en consideración el pedido formal de los trabajadores en relación de dependencia que representen las dos terceras partes del personal en actividad o de los acreedores laborales quienes deberán actuar en el período de continuidad bajo la forma de una cooperativa de trabajo.
El término de la continuidad de la empresa, cualquiera sea su causa, no hace nacer el derecho a nuevas indemnizaciones laborales…”
Tras ese objetivo se llevaban a cabo reuniones diarias y exhautivas, lecturas y estudio, para la conformación de una cooperativa de trabajo. Entre el 7 y el 21 de octubre se realizaron una serie de encuentros en la sede del Sindicato de Prensa. Con asesoramiento legal y técnico, expertos en cuestiones de cooperativismo expusieron las características de cómo asociarse para cumplir con un objetivo común.
En la nota presentada a los síndicos, se informaba fecha y hora de la Asamblea Constitutiva programada, que tendría lugar el 22 de octubre a las 19.30, en sede de El Diario; así como también solicitaban tanto a los síndicos, como por su intermedio a la Sra. Jueza, se contemple la posibilidad de mantener la fuente de trabajo.
Mientras las cuestiones en el Juzgado Civil y Comercial seguían su curso burocrático y el mañana se presentaba incierto, los trabajadores continuaban esperanzados y trabajando en la constitución de la Cooperativa.

ASAMBLEA CONSTITUTIVA

Aquella reunión pilar, tuvo lugar el 22 de octubre de 2002, en la sala de redacción del matutino. Un grupo de 22 empleados de un plantel de 90 que integraba la empresa antes de la quiebra, realizaron una asamblea y en su transcurso se dio lectura y se aprobó el Estatuto de la LA PRENSA Cooperativa de Trabajo y Consumo Ltda. (El acta fue remitida para su aprobación a la Dirección de Cooperativa). Además, se eligieron a los socios para el Consejo de Administración, cargos que luego se designaron en la jornada siguiente.
Siendo las 22 horas, con un triunfal aplauso y sincera emoción de los recién investidos trabajadores autogestionados, nacía la cooperativa La Prensa

PRIMEROS PASOS

Luego de la continuidad inmediata, advirtiendo que su interrupción podría generar gran daño a la conservación del patrimonio y en consecuencia al interés de los acreedores, los cooperativos presentaron el informe previsto por los últimos párrafos del artículo 190 de la LCQ, que dice: “…El informe del síndico debe expedirse concretamente sobre los siguientes aspectos:
1) La posibilidad de mantener la explotación sin contraer nuevos pasivos; 2) La ventaja que resultaría para los acreedores de la enajenación de la empresa en marcha; 3) La ventaja que pudiere resultar para terceros del mantenimiento de la actividad; 4) El plan de explotación, acompañado de un presupuesto de recursos, debidamente fundado; 5) Los contratos en curso de ejecución que deben mantenerse; 6) En su caso, las reorganizaciones o modificaciones que deben realizarse en la empresa para hacer económicamente viable su explotación; 7) Los colaboradores que necesitará para la administración de la explotación; 8) Explicar el modo en que se pretende cancelar el pasivo preexistente.
El juez a los efectos del presente artículo y en el marco de las facultades del artículo 274, podrá de manera fundada extender los plazos que se prevén en la ley para la continuidad de la empresa, en la medida que ello fuere razonable para garantizar la liquidación de cada establecimiento como unidad de negocio y con la explotación en marcha”.

PROLEGÓMENOS

El 22 de octubre de 2002 la contadora Graciela Pérez, en carácter de síndico de Gráfica Chaqueña y en cumplimiento de lo dispuesto por el artículo 274, presentó su informe, del cual se transcriben dos aspectos contenidos en el primer y tercer punto:
“1- Posibilidad de mantener la explotación sin contraer nuevos pasivos. La real posibilidad de continuar con la explotación de diagramación y distribución como así también la de impresión de los ejemplares de diarios, se concretaría en atención a la provisión de materia prima, ya que el resto de los elementos que se utilizan y se hallan en el establecimiento se encuentran en adecuado estado para ser usados en la explotación.
  3- La ventaja que resultaría para los acreedores de la enajenación de la empresa en marcha. La continuidad de la empresa en este tipo de actividad es importante, en tanto sea posible, pues el daño del cese de actividad sería un acontecimiento negativo difícil de revertir fundamentalmente para la posterior continuidad de la marca “El Diario” en circulación, la continuidad permitiría la obtención de un mejor precio relativo en el futuro de la empresa en marcha.”
En tal punto también citó el pedido formal de continuación recibido por parte de los trabajadores el 18 de octubre de ese año.
Las dificultades derivadas de la continuación determinaron luego un pedido de cese por parte de ambas sindicaturas, las principales causales fueron la dependencia casi absoluta del mantenimiento de la pauta publicitaria por parte del Estado Provincial y la necesidad de contraer nuevos pasivos.
El 14 de noviembre la jueza resolvió “Disponer el cese de la explotación de la empresa por las sindicaturas intervinientes y en el marco de tal continuación autorizar a éstas a celebrar contrato de locación con la cooperativa de trabajo (en formación) La Prensa; en los términos y pautas dispuestas en los considerandos que anteceden”
Ante esta resolución se presentó a plantear aclaratoria el primer constituido presidente de la cooperativa, haciendo notar que lo que se propuso no fue continuar la explotación de las fallidas sino la utilización del mobiliario, locación mediante, para la actividad a desarrollar por cuenta y riesgo de la cooperativa.
Lo resuelto se consideraba de sumo peligro, no sólo para la cooperativa ya que no podría adoptar decisiones propias, sino también para la masa de la quiebra al usufructuar la propiedad intelectual de un tercero muy difícil de definir.
La forma en que se formula la propuesta, decía el presidente de la cooperativa: “no implica riesgos ni quebrantos a las partes, acreedores ni terceros, en tanto la cooperativa asume riesgos y endeudamiento por cuenta propia, tanto por operaciones comerciales como por sus expresiones, incorporando a la masa de la quiebra un capital mensual que permitirá acumular efectivo para hacer frente de pago del pasivo”.
Entre idas y vueltas lograron obtener la autorización para operar como Cooperativa de Trabajo abonando un canon en concepto de “locación” por los bienes.
Desde el 1º de octubre hasta el 11 de diciembre de 2002, fecha en que el Juzgado Civil y Comercial de la Décima Nominación hizo entrega del matutino a la cooperativa, se trabajó bajo la tutela de los síndicos.
No hace falta decir que el diario nunca interrumpió su salida después de la quiebra.

DEL CAOS AL RENACER
El drama de la quiebra de la empresa Gráfica Chaqueña SACI y Editora del Nordeste, se enmarcó –o se aprovechó- de la profunda crisis socioeconómica del país. Pero la quiebra no respondió excluyentemente a la fatalidad del devenir político, sino a una estrategia de vaciamiento con tintes mafiosos.
Lo cierto es que, de los 10 periodistas que conformaban la redacción del diario, quedaron sólo cinco. De tres fotógrafos quedó uno. En administración no quedó ningún personal. En publicidad, de tres, quedó uno. En distribución eran cinco y quedó uno. En Sección Rotativa eran cuatro y se fueron todos.
Frente a este panorama desolador, los 22 socios que se quedaron para conformar la cooperativa, iniciaron la reorganización de la empresa.
El 22 de noviembre de 2002, en el “Viejo Café”, un bar que también funciona bajo una cooperativa de trabajo constituida por mozos, se realizó la presentación oficial de elDIARIO de la Región y su editora.
El 11 de diciembre del mismo año, la Justicia hizo entrega formal del diario a la cooperativa (a pesar que en el acta figura la fecha del 4 de diciembre).
Había que esperar unos años más para un fruto importante: El 11 de mayo de 2005, la Cámara de Diputados aprobó la expropiación de las rotativas - King Press 11901, de cuatro cuerpos- y los bienes muebles e inmateriales, entre ellos, el nombre de elDIARIO. De esta manera, los trabajadores lograron frenar el proceso de liquidación de los bienes, y aguardan que el gobierno provincial destine los fondos para que pasen definitivamente a ser propiedad de los trabajadores.
El proyecto de Ley de expropiación fue autoría del diputado Daniel San Cristóbal. Y merece recordarse aquí, la llegada a Resistencia del doctor Luis Caro, Presidente del Movimiento Nacional de Fábricas Recuperadas quien, en varias experiencias, como en la presentación ante los diputados provinciales, explicó detalladamente el proceso de recuperación de la empresa por parte de los trabajadores.
La propuesta de continuidad presentada ante el juzgado planteaba el alquiler como medio para adquirir derecho al uso de los bienes; por el mobiliario y equipamiento informático se abonaría la suma de quinientos pesos y por el uso de la máquina rotativa la de ochocientos pesos; ambos montos pasarían a acrecentar la masa de quiebra.
Respecto a la rotativa, se encontraba en posesión del diario en el marco de un contrato de locación que vencía en septiembre de 2003, para poder usarla solicitaban la cesión del mismo asumiendo el compromiso de pago.
En cuanto al inmueble, proponían acordar con el propietario la disponibilidad del mismo. El edificio en el que funciona la Cooperativa pertenece al Nuevo Banco del Chaco SA, entidad que autorizó mediante acta elaborado por su Departamento Legal, la utilización del inmueble por medio de un comodato.
Cuando se produjo la quiebra, se mantuvieron una serie de reuniones para definir su ocupación y porque era primordial poner en claro la ocupación del local para los distintos trámites ante organismos oficiales y privados. El Banco del Chaco, redactó un acta-acuerdo para hacer el uso del edificio, convenio que está en vigencia. Siguiendo el ejemplo de muchas otras empresas recuperadas del país se solicitó la expropiación del Inmueble y el once de mayo del año 2005 la Cámara de Diputados sancionó con fuerza de ley la Declaración de Utilidad Pública del inmueble sito en calle José Hernández 280 de la ciudad de Resistencia (ANEXO 5) el cual debía destinarse al funcionamiento de la Cooperativa de Trabajo y Consumo La Prensa Limitada.
La expropiación se realizó en los términos de la ley Provincial de Expropiación Nº 2.289, la misma dispone que la expropiación se considere perfeccionada cuando mediare sentencia firme, puesta a disposición y pago de indemnización.
Volviendo al relato de la historia, vivo aún en las retinas aquella noche en que los flamantes trabajadores autogestionados regresaban triunfantes de la Cámara de Diputados de la Provincia del Chaco, con cánticos y manteniendo la misma euforia de cuando se escuchó la aprobación legislativa de la expropiación de las rotativas.
“De vuelta a casa”, una fotografía frente a las rotativas inmortalizó el momento.

LA RESISTENCIA

Después de la euforia, la reconstitución. Y no fue fácil. Que el diario esté arraigado en una ciudad con escala humana y que por su esencia esté emparentada con la sociedad, hizo que ésta no sea indiferente hacia los trabajadores.
Cómo no recordar los eventos donde la comunidad artística participaba regalando su cachet; o el acompañamiento en esos mismos eventos de figuras notables de la comunidad.
Cómo no recordar a la vecina del edificio de al lado, Kuka, que cocinaba los guisos al mediodía, trayendo los ingredientes; la “transa” con el verdulero de la esquina, de verduras y hortalizas a cambio de una publicidad. La situación económica era penosa, las deudas, los agujeros negros que había que tapar, innumerables; difícil lograr la claridad para sostener el sofisticado andamiaje de una empresa de tal magnitud que se había venido abajo, vaciada y de repente, en manos y bajo la responsabilidad de los ex empleados, nacidos y amparados en la concepción de la patronal.
Hubo que hacerse en gestión y en capacitación. Se tuvo a mano la capacitación del Banco Credicorp. En uno de aquellos cursos preguntaba el formador ¿qué hacer cuando las recetas no funcionan, no encajan, no sirven? La respuesta era “Echar mano a los procesos creativos”. Mucha creatividad a la hora de supervivencia. Y mucha libertad. Cómo no disfrutar el periodista de ser editor responsable de su nota, de darse el lujo el diseñador de romper un estandar estético, por ejemplo… Cómo no enorgullecerse de decidir los destinos de aquellas magras entradas de dinero, honrando las deudas o invirtiendo en pos del crecimiento, antes que repartirlo entre los bolsillos de los trabajadores…
Hubieron muchas bajas por esos días, así como las corresponsalías del interior que caían como castillos de naipes; algunos, periodistas talentosos, compañeros de lucha, cuya partida mereció un luto; personas que no podían seguir batallando y llevando a la casa sólo la esperanza, porque la necesidad económica de sus hogares apremiaba, y el diario todavía no daba posibilidad de estabilización mínima, ni lo garantizaba al mediano plazo. Por ello, con acierto comenta un socio: “Cuando se recuerda la solidaridad de esos tiempos, allí está el aguante familiar que tuvimos los cooperativos. Sin nuestras mujeres, sin nuestros padres, no hubiéramos aguantado”.
Resistencia y más resistencia y esa dicotomía del padecimiento y el disfrute de estar luchando por la empresa de uno y colectiva.
Lentamente se fue incorporando personal en calidad de colaboradores para cubrir los espacios. Se comenzó a producir con una dotación mínima. Algunos de los socios y colaboradores ingresaban a la mañana y prolongaban su actividad hasta la noche o bien hasta la salida del diario en un desgaste físico y mental fácil de advertir.
Durante ese duro derrotero, se sobrevivió con la recaudación de ventas de diarios y de publicidad de la capital y el interior.
Los síndicos de la quiebra se comprometieron a entregar el diario a la cooperativa con un mínimo de stok de insumos y de materia prima, pero no dejaron nada.
Se llegó a comprar papel - restos de bobinas - en las chacaritas. El diario contenía 16 páginas en blanco y negro y unos trazos en rojo en tapa y contratapa. Las planchas offset se compraban al menudeo en Corrientes. Ningún proveedor daba crédito. Se juntaban monedas de la recaudación diaria por venta de ejemplares las que se colocaban en una bolsa. Así de simple y precario.
Fue muy importante en esa etapa el apoyo de distintos sectores de la comunidad y de los corresponsales y distribuidores, que lograron mantener un nivel de ventas para subsistir.
Y valga reconocer la ayuda invalorable que prestó el Sindicato de Prensa desde la primera hora, no solo políticamente, sino financieramente e inclusive en cuestiones solidarias varias, como la cobertura de obra social para los empleados. Recuerda un testimonio: “Cuando el gobierno de la Alianza nos castigaba económicamente y no podíamos comprar papel, el Sindicato nos sacó a flote con un préstamo importante de dinero sin ninguna certeza de devolución…”.
A las dificultades técnicas-operativas se sumó otro desafío: la aparición de otro diario en el mercado, el diario Primera Línea. Ex empleados de Gráfica Chaqueña SACI apuntalados por un grupo de empresarios de Resistencia y del interior iniciaron su incursión en el rubro periodístico al tiempo que rumores en Resistencia y en el interior provincial generaban dudas sobre la continuidad de elDIARIO de la Región afectando la moral del reducido plantel de los trabajadores de la cooperativa.
Los socios de la cooperativa recibieron la grata noticia que la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) disponía de un programa de pago único del fondo de desempleo para invertir en emprendimientos. Inmediatamente se iniciaron las gestiones y al cabo de dos meses los socios accedieron a esa modalidad de cobro y el dinero fue destinado al reacondicionamiento de la impresora rotativa.
Se invirtieron unos treinta y cinco mil pesos entre repuestos y mano de obra. Vale reflexionar que ne esta ocasión, los trabajadores dieron muestra de una conducta típica que marca el sesgo solidario de los trabajadores: la única entrada de dinero que aparecía para el desahogo personal, era sacrificada en aras de al empresa

TRABAJADOR AUTOGERSTIONADO

La Prensa Ltda., nació con ventidos socios orgullosos de poder mantener su fuente de trabajo. Tras el logro, se reveló la verdad desnuda: la cooperativa no era soplar y hacer botellas. Problemas e imprevistos a raudales dando comienzo a esa suerte de deserción de aquellos que “abandonaron el barco”.
Así fue que para 2005, sólo quedaban dieciocho de los originales fundadores de este emprendimiento. Por supuesto, se sumaron ventitrés trabajadores (algunos de ellos habían integrado la empresa quebrada, pero por distintas razones no se integraron a la cooperativa).
La cantidad de trabajadores varió según los momentos vividos, en 2003 llegaron a integrar la organización cincuenta personas. Pero, en los momentos de crisis bajaron a poco más de la mitad. Hoy el plantel de socios suma cuarenta y cuatro.
Los veintidos socios que se quedaron para conformar la cooperativa iniciaron la reorganización de la empresa. Lentamente, se fue incorporando personal para cubrir los espacios-lagunas, y quienes demostraron idoneidad fueron transformándose en asociados. Es voz común del periodismo vernáculo que “el diario fue semillero de periodistas”, muchos de los que hoy ocupan puestos en otros medios de comunicación o equipos de prensa, tuvieron su formación y foguepo en este matutino.
Sideral el cambio de estatus del trabajador de una empresa recuperada.
La empresa devenida cooperativa conlleva una original manera de organización que implica en los socios la adopción de prácticas nuevas y la aceptación de principios opuestos a los de sociedades comerciales. Hay una transformación central de la lógica patrón- empleado a trabajador autogestionado.
El cambio de rol producido, fue (es) de asimilación dispar; por ello, uno de los problemas a resolver, focalizó en zanjar la diferencia entre quienes entienden el significado de esta lógica y quienes no.
Si bien la horizontalidad característica debería tender a la participación y compromiso general, no se cumple con igual responsabilidad en todos. Esa es una de las debilidades que persisten y que no escapa al común de las cooperativas. Téngase en cuenta que el cooperativismo nace de la voluntad de todos los que se unen en la cooperativa, y en este caso, no surgió por voluntad, sino por necesidad.
Los flamantes socios de cooperativa formadas con el objetivo de recuperar una empresa no vienen “del palo” cooperativista y no tienen todos internalizados sus valores y principios, sino más bien, llevan en la sangre, por así decirlo, el karma de la cultura patronal.
Una de las maneras de corregir esa falla fue a través de la educación y ya se mencionó en tal sentido, una serie de cursos y charlas ofrecidas por el Banco Credicoop.
Muchas son las bondades de sistema cooperativo, donde se impone la organización horizontal que incluye la participación de los socios contra el viejo modelo de concentración de las decisiones; donde no existe el patrón y donde quedó eliminada la plusvalía…
Pero téngase en cuenta que asumir responsabilidades de gestión y dirección, no es tarea menuda, habida cuenta que todos los integrantes continúan con sus respectivas funciones cotidianas: desde el periodista al maquinista, aunque les toque el sayo de un puesto ejecutivo.
El cooperativismo es un fenómeno económico de unión, solidaridad y ayuda mutua de los trabajadores. Ser cooperativo posibilita un encuentro y compromiso humano distinto y de alta calidad con el compañero.

CONSOLIDACIÓN

Pasados los primeros años de crisis e incertidumbre, la Cooperativa comenzó a dar notables muestras de crecimiento. Para abril de 2005 ya integraban la organización cuarenta trabajadores, el tiraje creció de los raquíticos quinientos ejemplares iniciales a mil quinientos, hasta llegar a los tres mil quinientos que se tiran en la actualidad.
Merced a un subsidio otorgado por el Programa de Trabajo Autogestionado, en 2005, se inició el proceso de renovación tecnológica, para cambiar las obsoletas computadoras e impresoras heredadas de las quebradas, por máquinas de última generación.
Una vez que levantó cabeza, la cooperativa comenzó una etapa de integración con otras provinciales (Inimbó, CTC de Vilelas, Bermejo, Viejo Café, Colegio Estrada) y nacionales, y se primó la participación en redes y eventos nacionales, como la presencia en la Muestra Nacional de Empresas recuperadas, en el Encuentro Nacional de Cooperativas de Trabajo, o participando del Encuentro Latinoamericano de Empresas Recuperadas en Venezuela.
En cuanto a identidad política y vínculos, la Cooperativa de Trabajo y Consumo La Prensa está inscripta en el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES). Forma parte de la mesa provincial de la CTA Chaco y mediante la actividad periodística, se reivindican y acompañan los reclamos de los trabajadores. Forma parte de la comisión de asociados del Banco Credicoop de la ciudad de Resistencia.
Actualmente trabaja en el armado de la Federación de Cooperativas de Trabajo Chaqueñas

HACIA LA SOCIEDAD

La extensión cultural que viene realizando la cooperativa La Prensa, editora de el DIARIO de la Región, tiene mucho mérito por el diálogo permanente con su comunidad.
Desde su conformación ha proyectado una amplia actividad de extensión que hace a la formación y cultura de sus integrantes y que es volcada a la sociedad, su interlocutor válido.
Así, en la calle o en espacios verdes, ha provocado recitales con figuras de la talla de Horacio Fontova (que recibió el obsequio de una escultura en madera del escultor Manolo Benítez socio de la cooperativa, con tarea de armador de páginas) o festivales con presencia de grupos folclóricos regionales.
Apoyando al deporte, ha esponsorizado a deportistas chaqueños y a clubes.
Desde hace cuatro años la redacción del elDIARIO de la Región, no solamente es el cronista del arte crítico de Resistencia, sino también una importante productora y relatora de las expresiones visuales de Chaco. Por la redacción han pasado varias muestras de arte político y activismo, poniéndose un poco a la vanguardia de la difusión de estas construcciones artísticas de sesgo político. Cabe rescatar Arte político argentino (visitadas por Hebe de Bonafini); Contratapas de la revista Barcelona y la intervención “Otras permanencias”, de los activistas Vidal y Piffer,.
Material de consulta de los investigadores de arte y activismo es el suplemento dominical, donde semana a semana desde hace cuatro años, artistas de todas las latitudes intervienen una de sus páginas.
Y hablando de artes visuales, el diario también tuvo su película.
El Grupo Alavío - Video y acción directa, es un colectivo audiovisual que cuenta con una década de producción de materiales audiovisuales retratando los conflictos sociales y la lucha de los trabajadores. En ese marco, no podía escapar de su target, un diario rec uperado por sus trabajadores en el Chaco. Así pues, se llegaron en el 2004, hicieron migas con los socios mientras filmaron el escenario, la producción y los testimonios del pasado y el presente. Conceptualizaron en el corto “El Diario Cooperativa” que se present: “En la ciudad de Resistencia, provincia del Chaco, una de las más pobres del país, un grupo de trabajadores ponen a funcionar uno de los diarios de mayor circulación de la región luego del abandono patronal. La historia y la lucha de más de dos años para hacer crecer en calidad y cantidad la producción recorre también los límites y desafíos que existen en la producción masiva de un medio independiente o su transformación como herramienta plena para la lucha de clases”.
En el transcurso del 2007, elDIARIO de la Región formó parte del la iniciativa nacional “Contalo Vos”, organizado por el Ministerio de Desarrollo Social, a través de la Dirección de Educación Social y Popular, dictando los talleres de capacitación, culminando con una propuesta ganadora para la edición de una revista barrial.
En ese proceso, el diario brindó sus instalaciones al programa que buscaba incentivar proyectos de diarios y revistas barriales, dando la posibilidad a los ganadores de imprimir sus publicaciones totalmente gratis, así como la capacitación a cargo de los profesionales de la cooperativa La Prensa, editora de este matutino.
La iniciativa tuvo como objetivo promover y fortalecer los lazos y las redes sociales a través de prácticas de comunicación comunitaria que generen la inclusión social, aborden la construcción identitaria, recuperen la memoria, promuevan la participación ciudadana y el desarrollo cultural en todas las regiones del país.
En ese proceso, elDIARIO de la Región trabajó desde el marco de la Educación Popular en la reflexión sobre los siguientes ejes: Construcción del Trabajo Colectivo, Identidad, Participación, Redes Sociales, Memoria, Perspectiva de Género, Políticas Publicas Inclusivas, Comunicación Comunitaria, Diseño e Implementación de Proyectos.
En la oportunidad, distintas organizaciones barriales del Gran Resistencia y el interior provincial enviaron sus representantes para participar de las capacitaciones, durante el cual se procedió a la realización de una propuesta de comunicación barrial mediante una revista, siendo ganadora la revista “Somos”, de la ciudad del abrazo cordial, Fontana.
Desde el 2009, el DIARIO de la Región premia en el marco de la fiesta anual aniversario, a personalidades y figuras del medio, galardón de reconocimiento con carácter bienal.

EL CRECIMIENTO

Si en los primeros tiempos se proyectaba sobre la coyuntura, hoy se trabaja a mediano y largo plazo. Las planificaciones corren por cuenta del Consejo de Administración, pero a la hora de tomar decisiones riesgosas o estructurales se refrenda en Asamblea. Forma que se configura como un espacio para la discusión y la toma de decisiones que les permite a los socios intervenir en forma directa y que sus propuestas y puntos de vista sean escuchados y tenidos en cuenta.
Por caso, en Asamblea –y a voto a mano alzada- se decidió eliminar las jerarquías -director, jefe de redacción y demás cargos-, proponiendo que cada área designe un referente, coordinador, o responsable, elegido por cuestiones de idoneidad o experiencia, para representar a cada sección.
Romper las estructuras heredadas significó revelarse contra la centralización de las decisiones. Por esta razón, y para lograr el involucramiento en el gran proyecto, el nombramiento de los coordinadores de cada sección, elegidos por sus propios compañeros, marcó un principio de modificación del sistema de coordinación del trabajo, trasladando la forma representativa de la cooperativa al proceso de producción, permitiendo que la decisión sobre quiénes serán las autoridades sea del conjunto y no de quienes ostentan el poder en ese momento.
En Asamblea se decidió muchas veces la línea ideológica a seguir o la pertinencia ética ante el manejo de la información o de alianza política, etcétera.
Éstas son manifestaciones propias del nuevo modo de organización (impensadas bajo la empresa anterior), que se producen más allá de la dificultad para superar el viejo modelo de centralización de la autoridad. Los integrantes tienen la oportunidad para plantear sus inquietudes respecto del resultado del trabajo y que éste sea fruto de acuerdos y consenso, es decir, que de alguna manera represente a todos los que intervienen en su elaboración. Se produce la “apropiación” de aquello que hasta no hace mucho tiempo era potestad del patrón, que responde a una filosofía conjunta y no, como en el pesado al humor del dueño; acuerdos arribados mediante la discusión y el intercambio, con el tratamiento de temas que tienen que ver con aquello que los une, el trabajo, y bajo la forma democrática de toma de decisiones que caracteriza al sistema cooperativo.
El modo adoptado para distribuir los ingresos también es un rasgo de la identidad del nuevo sistema, igualados entre quienes desempeñan roles de conducción y quienes no. Se rompe así una tradicional diferenciación entre jefe-subordinado, dado a partir de los salarios establecidos ya no de acuerdo con un escalafón. Un paso más por romper la verticalidad del sistema.
Se da por hecho que el trabajo de todos los integrantes de la organización tiene el mismo valor, ya sea el que redacta las noticias, el que barre las instalaciones, o, por caso, el corrector integrante del Consejo de Administración, en una horizontalidad de la organización que se potencia en las Asambleas.
El diario funciona dividido en diez áreas: recepción, administración, publicidad, redacción (seis secciones), corrección, sistemas o armado (diseño para 40 páginas promedio), Fotomecánica, Rotativa, Expedición y Distribución.
Haciendo honor a su nombre “de la Región”, el diario suma páginas de Formosa y este 2011 se agrega Corrientes.
La cooperativa inscripta en el INAES está conformado por 42 socios. Asume por su propia cuenta la realización y desarrollo de tarea periodísticas en la producción, edición, distribución y comercialización de periódicos, venta de publicidad, realización de publicaciones, afiches e impresiones en general.
En tal sentido, y en la búsqueda de la diversificación de ingresos, el diario ha comenzado a explotar la veta de talleres gráficos. Así, imprime un diario de Corrientes, una decena de publicaciones de organizaciones –como la Red de Comunicación Indígena-, de partidos políticos, revistas del interior provincial, diferentes publicaciones del gobierno, etcétera.
Las tareas se realizan en la sede de cooperativa de Trabajo y Consumo La Prensa Ltda. editora de el DIARIO de la Región, José Hernández 280.

DYPRA/ADICRA

La estructura organizativa de la Cooperativa La Prensa se encuentra en un momento de transformación. Fue primero el cambio, rotundo y filosófico; luego fue la lucha por la continuidad con su bagaje de sacrificio, de experiencias iniciáticas. Tras ir por la consolidación empresarial y institucional, continúa el camino del crecimiento.
Un punto inicial y que resultó visagra, fue el ir al encuentro de otras recuperadas y cooperativas. Se comenzó a plantear una identificación con el sector cooperativo local y nacional, estrechando vínculos con otras empresas recuperadas y cooperativas de la provincia, y con movimientos de la economía social del país.
Podría remitirse al pasado cuando ante la necesidad de conectarse con otros medios periodísticos con similares características a la de ésta, Internet vino en la ayuda.
Así se supo que en el país, existían otras empresas recuperadas por sus trabajadores de sesgo comunicacional y surgió la idea de hacer una muestra fotográfica entre esos medios, itinerantes y así, en el Museo de Medios se inauguraba la Muestra Imágenes Recuperadas, que recogía fotografías periodísticas de los diarios cooperativos del país. Tuvo su periplo por Chaco, La Rioja y Córdoba. Ese fue el inicio, el conocerse, contactarse, actuar en conjunto. Se encontraba una veta preciosa: la solidaridad entre cooperativas a partir de su integración
Vino luego una Carta de Intención durante un encuentro celebrado en Villa María, y posteriormente, una reunión que tuvo lugar en Córdoba. Finalmente, los cuatro diarios argentinos editados por cooperativas conformadas por sus trabajadores de prensa y gráficos, firmaron el 10 de enero de 2008, en la sede de Copegraf, editora de El Independiente, un convenio que los asocia, con el propósito de fortalecer su desempeño institucional y económico. y finalmente el 10 de enero de 2008 se dejó constituida la Asociación de Diarios Cooperativos de la República Argentina.
Adicra quedó conformada por los matutinos El Independiente (La Rioja), El Diario del Centro del País (Villa María, Córdoba), Comercio y Justicia (Córdoba) y El Diario de la Región ( Resistencia, Chaco). Medios que tienen una raíz común: la autogestión, y una lucha histórica que los hermana: los trabajadores recuperaron su fuente laboral.
La entidad se planteó como objetivos "trabajar en la problemática común en la edición de diarios y en el quehacer cooperativo de las editoriales". Lo que significa “el abordaje en bloque de la provisión de papel ante Papel Prensa y convertirse en una alternativa receptiva de publicaciones nacionales”. Así como “el intercambio de información, experiencias y todo elemento que favorezca al avance económico y social de las integrantes, sin perder autonomía ni tampoco el horizonte social y solidario que proponen día a día".
Hoy preside Adicra, el periodista Juan Diego Turraca de el DIARIO de la Región.
En otro espacio también es protagonista la cooperativa La Prensa, Dypra. El 2 de diciembre de 2008, en Capital Federal quedó conformada la cooperativa de servicios Diarios y Periódicos Regionales de Argentina, donde confluyeron varias experiencias organizativas: diarios de la Provincia de Buenos Aires, Adicra y la participación de diferentes medios pymes de varias provincias, así como de la Red Gráfica.
Dypra, busca mitigar los nocivos efectos del monopolio del papel para diario en el país y en cuyo consejo de administración la cooperativa ocupa la vocalía titular.
La Asociación de Diarios Cooperativos de la República Argentina dio un salto importante al constituirse como Federación de medios de comunicación. Con sentido territorial y plural, ya que se suman otros medios de comunicación como portales de Internet y publicaciones varias; todas, naturalmente, llevadas adelante en la forma de cooperativas de trabajo.
En febrero de 2009, los miembros de la Federación Asociativa de Diarios y Comunicadores Cooperativos de la República Argentina (FADICCRA), compuesta por medios gráficos y digitales de cinco provincias, decidieron democráticamente que la Presidencia de dicha entidad quede en manos de la cooperativa

MIRADA AL FUTURO

En el Chaco se editan cuatro diarios, entre ellos El Diario de la Región.
De aquel diario de octubre de 2002, de 16 páginas, blanco y negro, hoy ofrece un producto con alta calidad de impresión, con un diseño a la altura de los más exigentes, con más páginas, más presencia territorial, más información, suplementos especiales, la edición de láminas educativas, una revista de tirada nacional opcional los domingos y la edición digital de el diario de la Región”.
Con esas cartas el producto el DIARIO de la Región, se coloca en el segundo lugar de las preferencias del público lector.
Actualmente, en la búsqueda de diversificar ingresos, se emprende el desafío de expandirse a partir de la explotación del taller gráfico de la cooperativa. Elabora un plan para que en corto plazo, la entidad ofrezca al mercado la mayoría de los servicios que en el rubro de gráfico se demandan, articulados con las secciones internas de publicidad, diseño y comercialización, para la obtención de un paquete completo, valor agregado y competencia.
En lo que respecta al diario, la ideología marcada por la economía social, la redistribución de los ingresos –en su forma justa e ideal- la democratización de la conducción, la equidad, etcétera, lo puso “en la vereda del frente”, en el sentido de ser una voz rigurosa desde la ética. Cabe señalar que cuenta con sus páginas de derechos humanos, que fue el primer medio que puso en el tapete y divulgó exhautivamente las causas judiciales de Margarita Belén y Caballero, antes que los otros medios de información del Chaco.
Enarboló el debate sobre Papel Prensa, adhieriendo al Proyecto de Ley para que se declare de interés público la producción, comercialización y distribución de papel para diarios, presentado por el Ejecutivo nacional.
Y desde hace más de una década tira una página semanal de ambientalismo, a cargo de una de las figuras señeras del tema en el Chaco.
Hechos que le dieron a elDIARIO de la Región un prestigio y reconocimiento singular.
El diario se encuentra hoy en una real consolidación de empresa de la economía social. Consolidación en su doctrina democrática, con la evolución de la conciencia cooperativa de sus miembros asociados; en sus principios solidarios, estrechando los vínculos con la sociedad; y en su carácter como medio de comunicación, cada día más libre de expresarse.
Desde lo abstracto, es positivo que la cooperativa se cuestione su razón de ser, que sus miembros se pregunten: ¿Qué somos? ¿Qué esperamos para el futuro? ¿Adónde queremos llegar? Establecer una visión, y la misión en la sociedad.
Las tradicionales relaciones laborales de la empresa capitalista ya no existen, el modelo de producción va adquiriendo identidad propia y la recuperación del trabajo dejó de ser una cuestión de supervivencia para convertirse, paulatinamente, en una forma de vida en un nuevo paradigma que los trabajadores nunca soñaron, pero que afrontan con su mejor arma: el trabajo.
Ahora los trabajadores están en pie de igualdad y cuentan con la posibilidad de decidir sobre su presente y su futuro. Coraje, esfuerzo, perseverancia, ayuda mutua de sus integrantes, construcción colectiva en la autogestión. La economía solidaria sigue rutilando sus valores democráticos y equitativos.
Hoy, la cooperativa La Prensa planea metas globales, a largo plazo que son avalados por los socios en las asambleas periódicas (órgano que representa la voluntad de la organización), se aúnan fuerzas y se piensa en pos de la copropiedad de la institución.
Con aciertos y aprendiendo de los errores este grupo de trabajadores que marcha hacia su primer década de gestión cooperativa pudo dar marcha a un diario, administrarlo y hacerlo crecer progresivamente, siempre en un marco de integración con sus pares de la Economía Social, profundizando sus vínculos con la sociedad, dignificando el trabajo, aportando en la construcción de una Argentina más justa.